Hay un cielo azul, hay un mar azul... y hay un barco azul, el que encontré hace unos días en el puerto de Valencia. No es raro, por otra parte, encontrarse con barcos pintados de azul: es un color fresco, brillante, que no rompe la armonía cromática cuando se encuentra en alta mar, lo que no quita para que haya otros que aporten su toque colorista. El encuadre de hoy es muy diferente a los anteriores; frente a la simplicidad de líneas de las majestuosas proas he optado por el abigarrado mundo de las cubiertas y las estructuras metálicas de los modernos pesqueros. Que el resultado sea atractivo queda al juicio de mis amables seguidores. El formato es 50 x 35 cm., en papel Guarro de 300 gr., y grano grueso.
El visitante encontrará en este blog una selección de mis acuarelas sucintamente comentadas, y una lista de blogs y páginas web sobre pintura, literatura y religión, pues no en vano considero el arte como una manifestación del poder creador de Dios, que ha dotado al hombre de la capacidad de plasmar la belleza que le rodea. Para conocer al ser humano con sus ilusiones y esperanzas, y por ende, a su Creador, incluyo esos enlaces.
Me encanta la suavidad de los tonos que manejas. Consigues unas acuarelas llenas de luz y atmósfera, como ésta. Un tema complicado el de las cubiertas de las embarcaciones que has resuelto magistralmente.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sono nata in un posto di mare.Passeggiare nella darsena era un'avventura,quando ero piccola.Hai colto perfettamente l'atmosfera del luogo!!!
ResponderEliminarBeautiful boat painting. Lovely mood and distance.
ResponderEliminarExtraordinaria acuarela: composición, armonía de colores en tonos suaves y luminosidad que lo inunda todo. Saludos y mi felicitación, Antonio.
ResponderEliminarPięknie oddany rześki chłód poranka. Bardzo dobra praca.
ResponderEliminarUna pintura fantastico, Antonio!!
ResponderEliminar