En los jardines de Los Viveros podemos encontrar desde espacios en los que las ramas de los majestuosos árboles crean una sombra tupida, hasta espacios en los que la claridad se adueña por completo del paisaje porque el ramaje de la vegetación que los puebla se ve impotente para brindar su sombra al paseante en otro caluroso verano. Estamos en uno de estos espacios: las yucas y las palmeras son las protagonistas principales y la luz reflejada en sus troncos, motivo de atracción para este deslumbrado pintor.
Muy bonito esta pintura, Antonio. Me gusta los arboles y las gente con el bebe! Un trabajo muy bueno!!! un abrazo!
ResponderEliminarMuchas gracias, Hilda.
EliminarTe ha quedado fantástico.
ResponderEliminarMe alegra que te guste, Tina; y te agradezco esas palabras de ánimo.
EliminarEstimado Antonio,
ResponderEliminarSus pinturas están llenas de amor y sentimientos memorable para la gente y la vida incluso en paisajes. Los colores son muy suaves y sensibles. Sigue haciendo un trabajo maravilloso!! Gracias por visitar mi blog.
Mis mejores deseos, Sadami
Dear Antonio,
Your paintings are full of love and caring feelings for people and life even in landscapes. Colours are very soft and sensitive. Keep up wonderful work!! Thank you for visting my blog.
Best wishes, Sadami
Muchas gracias, Sadami, por tu comentario tan elogioso.
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