Si hablar de invierno es evocar frío, lluvia, viento o nieve, hablar de sol es hacerlo de luz, calor, paseo, deporte, ... La mañana de un soleado día de invierno invita a pasear y disfrutar de esos tibios rayos de sol que van dando una agradable y característica tonalidad a todo lo que ilumina, particularmente a esas hojas que se resisten a caer. Planteada esta acuarela tiempo atrás, no ha sido hasta ahora cuando la he podido terminar. Estamos en uno de los pequeños jardines próximos al viejo cauce del río Turia y del puente 9 d´Octubre, de Valencia, del que se puede apreciar uno de sus elementos decorativos, esa especie de ala desplegada, al fondo. La acuarela está pintada sobre papel Arches, de 300 gr., con unas dimensiones de 38 x 28 cm.
El visitante encontrará en este blog una selección de mis acuarelas sucintamente comentadas, y una lista de blogs y páginas web sobre pintura, literatura y religión, pues no en vano considero el arte como una manifestación del poder creador de Dios, que ha dotado al hombre de la capacidad de plasmar la belleza que le rodea. Para conocer al ser humano con sus ilusiones y esperanzas, y por ende, a su Creador, incluyo esos enlaces.
Una acuarela precioso, Antonio. El Otono es lleno de luz y colores precioso... Buen trabajo!!
ResponderEliminarun saludo...
Gracias, Hilda; y que el nuevo año te regale más y mejores retratos al pastel.
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