Nos encontramos con la puerta del convento de San Julián ... solo que no está el convento. Dicho de otra manera: nos encontramos con los restos de lo que un día fue un edificio monumental y que, por vicisitudes de todo tipo, acabó siendo un montón de ruinas.
Javier Díaz Arnal -http://www.jdiezarnal.com/valencialosviveros.html- lo documenta en su excelente blog sobre Valencia.
Me ha parecido interesante incluir en la acuarela a un atento lector y a unos paseantes para darle un toque humano a este rincón del jardín de los Viveros.
Como siempre, me gusta mucho esta acuarela, Antonio. Los colores y detailles son perfecto.
ResponderEliminarun abrazo.
Muy agradecido, Hilda. Me alegra que te gusten tanto los colores como los detalles.
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